Mi favorito siempre será la goma vinílica blanca. Es fuerte, asequible y flexible. Es decir, permite que el libro puede abrirse sin problema. La puedes colocar con rodillo o con brocha. Y seca transparente. Nosotros utilizamos la marca tekno de color azul, que normalmente se vende para carpintería. Recomiendo comprarla en bolsa o balde e ir poniendo la cantidad que se va a usar en un envase hermético. Esto evita la contaminación de la misma.
En segundo lugar, está el engrudo artesanal. Este pegamento tiene muchos años de tradición. Lo genial es que es reversible, si se humedece se puede levantar sin dañar el material. Algo que ayuda mucho al momento de reparar un libro.
Nosotros lo preparamos con maicena, pero también se puede hacer con harina de trigo o harina de arroz. Cada uno de éstas dará acabados diferentes. Una vez preparado el engrudo, su vida útil es de cómo máximo 1 semana dentro de la refrigeradora.
Otro que es similar es la metilcelulosa, este material es más difícil de encontrar. Sólo lo he visto en casas de restauración. Igual es reversible y muchas veces se usa mezclado con la goma vinílica para conseguir un pegamento fuerte pero que no se seque tan rápido.
Algunos me preguntan por la silicona líquida o caliente, y realmente no la recomiendo para encuadernación, a menos que sea completamente necesario. Digamos que en los más de 5 años que tiene Lettra, y los más de 11 años que tengo de experiencia encuadernando, la he usado 4 veces en total. El problema de la silicona es que crea volumen y no es un pegamento que podamos esparcir de forma pareja.
En su lugar utilizo Adherpatch, este pegamento de secado rápido es transparente, no quema materiales ni tampoco deja volumen. Lo uso mucho cuando armo cajas o cuando tengo algún lino de acabado plástico que no quiere adherirse con la goma vinílica.
Por último, está el pegamento en spray. Y aunque puede ser muy útil, y salvarte más de una ocasión tampoco es el ideal. En papeles, después de algún tiempo se tiende a desprender, y en telas sino es aplicado correctamente puede manchar la misma. Además, emite un olor fuerte y puede causar mareos o dolores de cabeza. Así que si tienes sensibilidad a los químicos trata de evitarlo.
En cuanto al uhu, no lo recomiendo porque puede quemar materiales, así que lo usaría con mucha cautela, quizás con un aplicador. El cemento de contacto lo he tenido que utilizar en casos muy especiales, por ejemplo cuando quería pegar alguna pieza metálica como decoración y cuando trabajé con cuero sintético. El cuero natural puede ser encolado tranquilamente con goma blanca.
Antes de escoger cualquier de estos pegamentos, tengamos en cuenta nuestros materiales. Hagamos pruebas y optemos por el que se nos acomode mejor.