Algo que quizás sorprenda a algunos es que ya no acepto trabajos de encuadernación a pedido o personalizados. No es algo que hiciéramos regularmente, era más una oportunidad que aparecía una vez al mes, quizás 2 veces por mes. Si bien era divertido, también tomaba bastante tiempo. Y ahora, más que nunca, estoy aprendiendo a decidir cómo quiero utilizar mis días.

Mucho de mi semana se va en las clases online. Entre grabar, editar y subir todo el contenido al aula virtual, sumo 3 días de trabajo. Me gusta mucho hacerlo, disfruto del proceso. Me divierte jugar con diferentes opciones y aprender más sobre temas de edición.  Además, estoy tomándome un tiempo para seguir mejorando mis técnicas de encuadernación, y así mejorar el contenido de las clases.

Quizás pienses… “¿pero le estás diciendo que no a oportunidades de ingresos?”. Un tema que me costó mucho entender era cómo hacer un negocio escalable y rentable.

Es decir, cómo puedes incrementar tus ingresos sin necesidad de trabajar hasta el cansancio. Cuando tu emprendimiento te encanta, a veces, le pones tanto de ti mismo que no consideras cuánto vale tu tiempo.  Digamos que una encuadernación me toma 4 horas, en ese mismo tiempo podría estar grabando una clase, o podría estar escribiendo unos 3 artículos para mi blog. Si acepto todas las oportunidades que aparecen quien termina dirigiendo mis días es el resto, y no yo. ¿Da miedo decir que no? A veces, pero una vez que tomas control, te enfocas y te comprometes, puedes ver los resultados. Si necesitas un poco de ayuda extra puedes hacer click aquí para recibir gratis mi planner semanal, y así volver a tomar las riendas de tus días.

¿A qué parte de tu negocio le podrías decir adiós? ¿Alguna vez te has puesto a analizar tus números?